Es muy frecuente escuchar a la Presidenta hablar del “Modelo Económico” del matrimonio presidencial, cuya defensa es una muletilla pre-electoral y que también lo expresan ministros del Ejecutivo como el de Interior, la ministra de la Producción y el Jefe de Gabinete. Sin embargo, el conflicto con el Campo ha puesto de manifiesto que tales afirmaciones son claramente falsas.Por ejemplo, se ha prohibido la exportación de carnes. En un mundo que demanda alimentos, perjudicando severamente a los productores. Se castigó mucho tiempo la producción de leche; se castigó la producción de trigo y disminuyó ostensiblemente la cosecha; ni hablar de la soja calificada como “yuyo” y cuyas retenciones son confiscatorias y agravian a los productores. Fue la piedra del escándalo en el 2008 y vuelve como un fantasma en el 2009. Hoy las partes –después de más de 8 meses- vuelven a sentarse a dialogar y el reclamo del sector rural es “ bajar retenciones a la soja”, liberar la exportación de carnes, resolver el problema de las Economías Regionales, entre otros aspectos que incluye uno fundamental: acordar una política agropecuaria integral y a mediano plazo. Lo que demuestra que no existe tal plan. Y si la Argentina sigue siendo un país agro-industrial, es evidente que no hay modelo agropecuario. Se carece por lo tanto de un Proyecto Estratégico para la Nación.
El Desarrollismo siempre ha sostenido y practicado, que es imprescindible un Plan de Desarrollo Integral que contemple la integración “agro-industria”. Justamente por que de allí deriva el “modelo de desarrollo” del país. Y de ésa combinación surgirá la incorporación creciente de “valor agregado” a la producción que se exporta. El balance comercial favorable será constante si existe este componente. Si no existe, estaremos en la “cuerda floja”, con una debilidad inocultable. Además, la agregación de valor supone trabajo y con él mayor demanda de empleo que disminuye desocupación, pobreza y exclusión. En estos últimos aspectos estamos igual o peor que después de la crisis del año 2001. Simplemente, por que después de 2005 el esquema económico del gobierno comenzó a perder el vigor de sus primeros dos años. Se instaló la inflación, comenzaron los problemas de financiamiento de las provincias, el gasto público aumentó, las obras públicas comenzaron a desacelerarse, los planes sociales no se incrementaron y la situación se tornó más grave a fines de 2007. El año 2008 (crisis con el campo incluida) el principio de la recesión se comenzó a manifestar y a fines del pasado año la Crisis internacional dio sus primeros signos.
Habrá que saber ¿de qué modelo habla entonces? la locuaz oradora del atril. Que engaña al pueblo Argentino sistemáticamente. Miente con las cifras, convalida la calamidad del INDEC por lo que para la Presidenta hay menos pobreza e indigencia, antes de fines de año dijo que “el efecto jazz” de los países centrales no nos perjudicará, ahora reconoce que sí. En consecuencia ensaya el plan B, para –dice- promover el consumo. Pero se queda en los anuncios. En la realidad pasa muy poco y nada. La Asamblea Legislativa del 1 de marzo fue una demostración elocuente de la serie sistemática de auto-elogios y tergiversación estadística, pero lo más grave: la precariedad del gobierno sobre cómo afrontar la arrasadora crisis financiera y económica internacional. Por que sólo inyectando dinero de los jubilados no se reactivará el mercado interno, jubilados, que es bueno recordar, en más del 80% tienen haberes que los sitúa por debajo de la línea de la pobreza No habría sido mejor aumentar con índices superiores los salarios de los jubilados y pensionados mejorando la movilidad previsional?
En el plano internacional, las cosas no podrán ir peor. No tenemos financiamiento externo. Se anunció el pago al “Club de París” y no se concreta por la crisis. Se reniega del F; M.I. y ahora volverá el organismo a auditar la Economía Argentina. Se desata la furia cuando se conoce el informe de la C.I.A que alude a los efectos de la crisis en la Argentina, pero se desea “casi con fervor” un encuentro con Barak Obama que ya citó a Lula y habló con Bachelet. Hacían décadas que no teníamos políticas externas tan erráticas. Que como consecuencia nos aíslan del mundo.
Téngase presente que en un año, no han mejorado las relaciones con Estados Unidos, sino que persisten nubarrones en la relación bilateral. Sigue el conflicto con Uruguay, en relación a Europa sólo relaciones esporádicas con España, teñidas por conflictos con las empresas españolas; con Brasil no hay alianza estratégica sólida. Con Chile no ha mejorado sustancialmente la relación. Ninguno de estos temas estuvo presente en el discurso “sobre el Estado de la Nación” ante el Congreso.
“Avive el seso y despierte” decía el poeta. Expresión que viene como “anillo al dedo” de los celosos defensores del “modelo”. Entonces, el dilema de las elecciones de Octubre de 2009 no será si se vota a favor o en contra del modelo. Se intuye que será un voto castigo de los que mienten sistemáticamente, buscan consolidar la hegemonía, el autoritarismo, el desprecio por el Sistema Republicano y en los hechos desprecian a los pobres. Las mentadas actitudes ideológicas de izquierda se tornaron un ejemplo de “Populismo conservador” para intentar conservar el poder, seguir degradando el Federalismo, esquivar el Desarrollo, fomentar el “capitalismo de amigos” y evitar una contundente derrota en las urnas. Pero Octubre no esta lejos y demostrará que el poder se les escurre como del agua entre las manos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario