“El proyecto ha sido formulado para cuatro departamentos: 13 municipios en La Paz, 26 en Oruro, 17 en Potosí, y 4 en Cochabamba; no es la totalidad de las provincias sino sólo aquellas que se dedican a los camélidos”, destacó Pérez.
Con todo, el proyecto VALE, se estima, alcanzará a 49.740 familias, divididas entre un “grupo-objetivo” de 14.100, criadores especializados y semi-especializados de camélidos; y 35.640 de beneficiarios indirectos, el conjunto de tenedores no especializados de camélidos domésticos.
En el ámbito productivo, VALE trabajará las bases productivas, como la provisión de forraje, el mejoramiento de praderas nativas, infraestructura de crianza, perforación de pozos, entre otros aspectos.
Los componentes de la iniciativa son cuatro: 1) manejo sostenible y aprovechamiento racional de la vicuña; 2) promover inversiones facilitadoras de la economía campesina de camélidos; 3) administración de activos monetarios y acceso a instrumentos de inversión y aprendizaje; y, 4) gestión del proyecto y seguimiento y evaluación.
Los ejes estratégicos del proyecto VALE son: un enfoque de negocio y de mercado, las transferencias directas de recursos financieros a los beneficiarios, métodos competitivos de asignación de recursos del proyecto y un adecuado control social del proyecto.
Pérez aseveró que el lanzamiento oficial del proyecto Vale se efectuará en esta penúltima semana de marzo.
El técnico de Cipca, añadió que el financiamiento del proyecto está a cargo del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), con un presupuesto de 14 millones de dólares.
A corto plazo, el programa busca estructurar las bases de una industria de aprovechamiento sostenible de la fibra de camélidos silvestres.
“Nosotros como Cipca solamente orientamos y apoyamos al Anapca (Asociación Nacional de Productores de Camélidos) y facilicitamos la coordinación con las bases, organizaciones. Orientar en políticas públicas que beneficien al sector”, destacó.
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