Los 18 millones de bolivianos como pérdidas son resultado de evaluaciones, muchas en el terreno, que hicieron alcaldes, consejeros y autoridades originarias de los municipios afectados, destacó González.“Lo que hace el SEDAG es la asistencia para la evaluación de los daños, la cuantificación de familias y la afectación de cultivos por los diferentes fenómenos; en ese entendido, se sigue haciendo la visita a las comunidades y municipios”, destacó la funcionaria prefectural.
Se trata de municipios de por lo menos 13 provincias del departamento: José Manuel Pando, Pacajes, Ingavi, Gualberto Villarroel, Muñecas, Franz Tamayo, Abel Iturralde, Sud Yungas, Camacho, Bautista Saavedra, Murillo, Los Andes y Omasuyos.
Situación critica
Gonzáles aseveró que la situación más crítica se la vive en las provincias José Manuel Pando, Pacajes, Ingavi y Camacho.
Producto de su visita a los municipios, González destacó los marcados contrastes que se ve entre comunidades vecinas: con una sostenida sequía en una, por ejemplo, al lado de otra donde lo que ocurre más bien son las lluvias y el granizo.
“Hay una situación bastante grave en Comanche (Pacajes). Las comunidades cerca a la Cordillera son afectadas por el granizo, uno camina aproximadamente un kilómetro en el mismo municipio y se encuentra con otro problema, la sequía”.
Pese a que en algunas regiones donde hubo sequía ya se presentaron las lluvias, éstas no fueron suficientes o llegaron muy tarde, de modo que igual los productores están afectados: “para nosotros como prefectura departamental es una preocupación, porque apenas pase un poco las lluvias la gente va a demandar asistencia de la prefectura y el gobierno central”.
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