La Paz, 31 ene (ABI) - Las lluvias, riadas e inundaciones que en los últimos días se desataron en ocho departamentos de Bolivia, afectaron 8.752 hectáreas agrícolas, 0,90% de los cultivos en el país andino amazónico, no amenazan, ni de lejos, la seguridad alimentaria y menos justifican el alza en los precios de los productos agrícolas, hizo notar el gobierno del presidente Evo Morales.
Mientras las estimaciones meteorológicas reportan incremento de aguaceros, la cifra podría, in extremis, elevarse a 14.000 hectáreas de cultivos afectados hasta marzo de este año.
El viceministro de Desarrollo Rural, Víctor Hugo Vásquez, explicó a la ABI que la producción que hasta el momento fue afectada no justifica el incremento de precios que registraron algunos productos en los mercados del país, por lo que llamó a la calma a la población boliviana.
"Tenemos 8.752 hectáreas afectadas a nivel nacional. No debe existir ninguna razón para alarmarnos, no deben subir los precios, no van a faltar los alimentos porque la cantidad de hectáreas que han sido afectadas alcanza a 0,90% en comparación con la cantidad de hectáreas que se siembran de los productos que han sido afectados", en este caso plátano, papaya y cítricos, dijo.
Por lo tanto, Vásquez garantizó la producción de alimentos para el mercado interno, a precios justos.
Agregó que el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras está trabajando en el tema de la rehabilitación agrícola y ganadera, coordinando permanentemente con los municipios afectados, por lo que la próxima semana sus destacados visitarán varias provincias del oriente boliviano, que fue el más afectado por las lluvias.
También el agropecuario departamento Beni, para llevar sales minerales que servirán para alimentar al ganado vacuno.
"Además, no estamos de manos cruzadas, estamos trabajando permanentemente con el Ministerio de Defensa en la entrega de alimentos. Vamos a entrar con un primer paquete en los próximos días, por eso se está cuantificando la cantidad de ganado damnificado y en función a eso se determinará la cantidad de alimento", agregó el funcionario.
El Viceministro dijo que las inundaciones también afectaron a 10.000 hectáreas de arroz, pero que esta producción no está perdida aún, puesto que los aguaceros ayudan a que exista una mejor producción, a no ser que permanezcan por mucho tiempo.
"Hay subidas y bajadas de precios que es parte de la fluctuación de precios de los productos, pero no existe absolutamente ninguna razón para alarmar a la población porque las fluctuaciones corresponden al mal estado de caminos; las lluvias son parte de la época", aseveró Vásquez.
El Indice de Precios al Consumidor registró en Bolivia poco menos de un tercio de punto porcentual en 2009.
Asimismo, desmintió algunas especulaciones que dieron cuenta en pasados días que el número de hectáreas habría incrementado, "situación incorrecta" según los informes de ese despacho.
Adelantó también que el Gobierno, como apoyo a la producción, irá asignando cupos de exportación dependiendo del nivel de producción que se tenga.
Esto como incentivo, por lo que los técnicos del Viceministerio negociarán los montos, pero en primera instancia se garantizará el abastecimiento interno, sostuvo.
El gobierno de Morales declaró situación de emergencia en los nueve departamentos del país azotados por los aguaceros.
Mientras las estimaciones meteorológicas reportan incremento de aguaceros, la cifra podría, in extremis, elevarse a 14.000 hectáreas de cultivos afectados hasta marzo de este año.
El viceministro de Desarrollo Rural, Víctor Hugo Vásquez, explicó a la ABI que la producción que hasta el momento fue afectada no justifica el incremento de precios que registraron algunos productos en los mercados del país, por lo que llamó a la calma a la población boliviana.
"Tenemos 8.752 hectáreas afectadas a nivel nacional. No debe existir ninguna razón para alarmarnos, no deben subir los precios, no van a faltar los alimentos porque la cantidad de hectáreas que han sido afectadas alcanza a 0,90% en comparación con la cantidad de hectáreas que se siembran de los productos que han sido afectados", en este caso plátano, papaya y cítricos, dijo.
Por lo tanto, Vásquez garantizó la producción de alimentos para el mercado interno, a precios justos.
Agregó que el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras está trabajando en el tema de la rehabilitación agrícola y ganadera, coordinando permanentemente con los municipios afectados, por lo que la próxima semana sus destacados visitarán varias provincias del oriente boliviano, que fue el más afectado por las lluvias.
También el agropecuario departamento Beni, para llevar sales minerales que servirán para alimentar al ganado vacuno.
"Además, no estamos de manos cruzadas, estamos trabajando permanentemente con el Ministerio de Defensa en la entrega de alimentos. Vamos a entrar con un primer paquete en los próximos días, por eso se está cuantificando la cantidad de ganado damnificado y en función a eso se determinará la cantidad de alimento", agregó el funcionario.
El Viceministro dijo que las inundaciones también afectaron a 10.000 hectáreas de arroz, pero que esta producción no está perdida aún, puesto que los aguaceros ayudan a que exista una mejor producción, a no ser que permanezcan por mucho tiempo.
"Hay subidas y bajadas de precios que es parte de la fluctuación de precios de los productos, pero no existe absolutamente ninguna razón para alarmar a la población porque las fluctuaciones corresponden al mal estado de caminos; las lluvias son parte de la época", aseveró Vásquez.
El Indice de Precios al Consumidor registró en Bolivia poco menos de un tercio de punto porcentual en 2009.
Asimismo, desmintió algunas especulaciones que dieron cuenta en pasados días que el número de hectáreas habría incrementado, "situación incorrecta" según los informes de ese despacho.
Adelantó también que el Gobierno, como apoyo a la producción, irá asignando cupos de exportación dependiendo del nivel de producción que se tenga.
Esto como incentivo, por lo que los técnicos del Viceministerio negociarán los montos, pero en primera instancia se garantizará el abastecimiento interno, sostuvo.
El gobierno de Morales declaró situación de emergencia en los nueve departamentos del país azotados por los aguaceros.
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