1. Bolivia
debe priorizar producción de trigo para cubrir su demanda (El Mundo)
[1] Según
Marín Condori resolver el déficit de producción de trigo tiene que ser una prioridad
para el Estado Boliviano. Se producen 200.000 tn/año de trigo en un buen año,
que es inferior a la demanda interna que se calcula en 800.000 tn/año de trigo.
Considera importante tener variedades de trigo que sean resistentes a los
fuertes vientos y a la piricularia. Por otro lado, considera que debe
discutirse a profundidad entre todos los actores de la cadena de valor del
trigo.
2. EMAPA
alcanza el record de 2,1 millones de qq de harina de trigo y garantiza un
precio justo (Atb)
[2] El Estado
nacional vende harina de trigo subvencionada al sector panificador, hasta la
fecha entregó 2,1 MM/qq. Emapa compra trigo de los pequeños y medianos productores
por un valor de 384 MBs. Por otro lado, Emapa entrega harina de trigo en 141
Bs/qq (El Alto, Cochabamba y Beni), a 128 Bs/qq (Oruro, Potosí, y Chuquisaca),
para mantener el pan de batalla a 0,5 y 0,33 Bs/unidad; además estos precios
corresponden a “panes de batalla” de un gramaje de 60 gr/unidad.
3. El
precio de la harina se dispara e inquieta a los panificadores de Tarija (El
País)
[3] Los
precios de harina de trigo fluctúan entre 220 a 230 Bs/qq, antes costaba entre
180 a 200 Bs/qq. El kilo de harina de trigo cuesta entre 6 y 7 Bs, se asume que
este incremento es debido a los planes económicos que atraviesa Argentina. Se
pretende analizar a principios del 2024 el precio del pan de batalla, como una
medida para cubrir los altos costos de producción, por otro lado, la subvención
de harina de trigo del Estado no beneficia a Tarija.
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